Buenos días!
Hoy os vamos a explicar paso a paso la manera correcta de curar una ampolla, que es una de las lesiones más habituales en el verano. Hay muchos tipos de ampollas: las producidas por el roce del calzado, las producidas por quemaduras, las propias de las infecciones por hongos, etc.
Hoy nos vamos a centrar en las ampollas producidas por el roce del calzado, que son las que habitualmente se producen el los pies. Por esto en primer lugar, lo que debemos hacer es intentar usar un calzado que nos resulte cómodo y no nos friccione en ninguna parte del pie.
Las ampollas se producen debido al calor de la fricción. Esto produce que se separe la capa más superficial de la piel y que este espacio se llene de líquido, incluso de sangre.
Pues bien, si me encuentro con una lesión como ésta, en primer lugar debo drenar el líquido. Para ello se deben hacer dos pequeñas incisiones. Lo recomendable es utilizar una aguja estéril. Un vez salga todo el líquido (que debe ser seroso) aplicaremos un desinfectante y taparemos.
Como desinfectante os recomiendo Clorhexidina (Cristalmina) o Povidona Yodada (Betadine). Ya que las ampollas aparecen en zonas de fricción, os recomiendo que las protejáis con un apósito.
Si tenéis que continuar con el calzado que os produjo la ampolla (si, por ejemplo, estáis de viaje) o está en una zona que os produce mucho dolor, os recomiendo que protejáis la zona con un apósito de hidrocoloide o segunda piel (tipo Compeed).
¿Habéis tenido una ampolla alguna vez? Espero que esta información os haya sido de utilidad. Os dejo un vídeo donde os la explico todo más pormenorizadamente. Si tenéis alguna duda no dudéis en dejárnosla en comentarios.
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M.Dolores